Navegando por la red me encontré con una colección fotográfica de 11 graffitis pintados en varias calles de Brasil, en donde se expresa el pueblo de aquel país en contra del excesivo gasto público y las inversiones desmedidas para la organización de la Copa Mundial de fútbol. Sin más que decir, disfrute de las imágenes.
La imagen viral más famosa que ha invadido las redes sociales, ¿acaso un balón fabricado con cuero sintético alimenta?
En un autobús, la leyenda "Fuck FIFA", como para que don Blatter y sus amigos se dejen de joder un poco.
Fuleco, el armadillo mascota del Mundial, junto a un cerdo capitalista pegándose un tabaquito y usando un estadio como cenicero.
La bandera de Brasil con la leyenda "vendido" y un indio amazónico levantando la Copa del Mundo.
"Sal a la luz" y "juntos por un nuevo Brasil" son las leyendas incluidas en este mural que llama a la unión y a la reflexión a los habitantes del gigante sudamericano.
¿Puede ser más claro el mensaje?
Los "viejos pelucones" juegan Monopoly en una mesa formada por sus "esclavos".
Una imagen que refleja perfectamente a 'o Rei Pelé' y a sus intereses. El otrora mejor jugador de la historia fue capaz de vender a su hijo con tal de ganar unos billetes verdes. No creo que sea una limitante para él vender a su país.
Un niño llora mientras lleva la camiseta de la selección brasileña junto a la leyenda "destrucción de mi comunidad". Creo que este mural es el que refleja mayormente la situación actual delm país.
El poder, como lo predica, Lacán
es invisible y lo es porque actúa en diferentes áreas de nuestro diario vivir
adoctrinándonos sin que nosotros advirtamos que estamos siendo alienados a la
ideología impuesta.
Por ejemplo, la ideología que
todos tenemos va acompañada del consumo. De esta forma el sujeto piensa que
está siguiendo un pensamiento, cuando en realidad solo está siendo acarreado
por un modelo pre establecido, que lo
conduce según sus propios propósitos, en este caso a comprar más.
Dibujos animados
En el presente ensayo nos
dedicaremos a hablar sobre los dibujos animados y su impacto directo en la
reproducción del sistema establecido. El dibujo animado se establece como
medida de manipulación mental de los dos bandos, tanto de los que están en el
poder, como de los que luchan contra este y su enfoque principalmente va
dedicado a los niños.
El estereotipo social ubica al
niño como el público que tiene que consumir los dibujos animados. Entonces las
caricaturas per se son vistas como producciones simples, que no contienen
mensajes violentos y aluden a valores en pro del desarrollo del infante.
No obstante, por años y desde los
dibujos animados, las historietas o los mangas; contienen simbolismos y en la
mayoría de casos son realizados con una intencionalidad, que en ocasiones
apuntan a asentar una ideología entre niños y adultos.
El Estereotipo
El estereotipo es la principal
manera mediante la cual los dibujos animados establecen la diferencia de lo correcto
contra lo erróneo. La diferencia entre
lo bueno y lo malo y la perpetuidad del sistema establecido son los dos
mensajes que nos inyectan estos dibujos animados.
La gran fábrica de sueños está
lleno de príncipes y princesas. También está lleno de personajes secundarios
infantiles que son sumisos a los principales y pierden el aura de su propia
existencia. Finalmente, son en su mayoría los villanos los que tratan de romper
el sistema establecido, ellos en su gran mayoría son reproducidos como personas
déspotas, violentas, en ocasiones son feos y grotescos.
Walt Disney
La empresa Walt Disney es la que
más reproduce lo antes mencionado. En su gran mayoría las producciones de
Disney representan estereotipos en los cuales los que tienen el poder al
principio de la película (la princesa) es la que termina venciendo, en contra
de aquellos que osan discutir su papel de poderío.
Aladdín de Disney, por ejemplo,
nos muestra al malvado Yaffar que quiere ser el nuevo sultán de Agrabah. Este
sujeto es sin duda el malo de la película, pero al final es vencido y
derrotado. ¿Por quién?
En una primera visión diríamos
que es un aldeano que logra ser el futur sultán, pero si analizamos la película
veremos que su posibilidad de crecimiento solo existe en el momento en que deja
de estafar al sistema, es decir deja de ser ladrón.
Luego, no por méritos sino por
una dadiva del destino logra ser príncipe, con la ayuda de un genio, esta
lectura nos dice “No te preocupes, no es necesario el esfuerzo, verás que
lograrás a llegar arriba donde estamos, sin que tomes ninguna acción desestabilizadora”.
Los dibujos animados nos
instauran en una gran fábrica de sueños donde todo es posible, excepto luchar
contra el sistema. La máxima aspiración del sujeto “inferior” es ser parte de
este sistema.
Bichos, producción de Disney y
Pixar, al puro estilo de la Rebelión de la Granja, de Orwell, nos muestra en un
principio la lucha comunista frente al tirano. El problema es que al final
alguien se casa con la reina Hormiga, lo que genera en una reproducción del
sistema clasista.
Podemos poner muchos ejemplos y en
menor o mayor cantidad, se establece está lucha ideológica. Algo que por cierto
no es nuevo.
El tema explotó desde la Segunda
Guerra Mundial. Existen todavía en Youtube animaciones que reflejan al judío
como un comerciante corrupto y depredador de la naturaleza, o la misma Disney
establece un panorama infernal de la pedagogía corrupta de los niños alemanes,
mediante un film de dibujos animados.
Por eso hablamos que los dibujos,
como herramienta de difusión son usados por los dos bandos. Como defensa a Cuba
por ejemplo, existe un corto animado llamado Cuba vs bloqueo, en el cual se ilustra
a la malvada águila norteamericana, frente a un cubano que tiene que evadir a
este monstruo para dar una medicina a una niñita.
Pato Donald
El caso más emblemático de carga
ideológica lo tiene el Pato Donald, dibujo creado por Disney y que en el pasado
fue una insignia de un dibujo animado anti nazi. Terminada la guerra, como lo
indican Ariel Dorfman y Armand Mattelart, el pato Donald se convirtió en un
proletario reproductor de sistemas y pro “buen salvaje”.
En el libro como leer al Pato
Donald, los dos autores develan que el Pato Donald se ha convertido en un
estereotipo de un sujeto que no tiene aspiraciones por desarrollarse y solo
vive el día a día con trabajos de media clase que no son profesionalizados. El
Pato Donald está cosificado y condenado a la eternidad para cumplir trabajos de
8 horas sin especialización y por supuesto siempre bajo la sombra del Tío Mc
Pato.
Pero el Pato Donald, en su nivel
medio, tiene una fortaleza. Es pues sus visitas, bastantes frecuentes a países
de la periferia y su amistad con habitantes de estos sectores que lo ven como
un héroe, lo que destacan los autores del libro, calificando a estos nativos
como “el buen salvaje”.
En términos generales, el Pato
Donald, representa la visión de Disney sobre la colectividad, rodeado por otros
estereotipos, como el dócil Tribilín, que no representa ninguna amenaza para el
poder; o Mc Pato, que es el rico avaro, cuya única visión es seguir acumulando
capital y que solo tiene algún rasgo de humanidad frente a sus sobrinos.
Los sobrinos del Pato Donald
también juegan un papel fundamental, pues sus acciones siempre van apegadas al
consumismo. Ellos siempre intentan reproducir los valores adultos de la
acumulación, pero desde una visión inocente.
El niño puro reemplaza al adulto
corrompido, es así que el futuro del niño representa el presente del adulto que
a su vez retrasmite el pasado. Este esquema reproduce los males de la sumisión
a la necesidad consumista de la sociedad.
Animación japonesa
La animación japonesa representa
otra arista de los dibujos animados. El anime tiene como finalidad ser
embajador cultural de Japón en otros países. En Quito una gran cantidad de jóvenes
cada vez mayor están más familiarizados con la tradición oriental que el mismo
pasado indígena.
Esto es porque las producciones
japonesas tienen como misión vender a su país al extranjero.
Es un medio
Como cualquier otra forma de
comunicación, los dibujos animados solamente son un medio para transmitir un
mensaje, por eso, así como puede transmitir ideología reproductora del poder,
también pueden servir para enviar mensajes de reflexión.
Lo importante es que desde
Latinoamérica se le dé a esta área la importancia que merece y se cree
producciones que reivindiquen la identidad de esta región del planeta y creen
niños reflexivos y que no se reproduzca un espíritu conductista. (JLV)
Les invito a visitar mi blog: http://kakariko-village.webnode.es/
"Nuestra economía
enormemente productiva pide que hagamos del consumo nuestra forma de vida, que
convirtamos la compra y uso de los bienes en un ritual, que busquemos nuestra
satisfacción espiritual, nuestra satisfacción del ego, en consumo. Nosotros
necesitamos cosas consumidas, quemadas, reemplazadas y descartadas a paso
acelerado”.
La premisa pasada corresponde a Víctor Lebow, quien junto a
Adam Smith, construyó las bases del Capitalismo de consumo, neoliberalismo,
economía de mercado, capitalismo salvaje y recientemente capitalismo
humanitario (que pueden fácilmente ser símiles a la lógica social demócrata,
socialismo del Siglo 21 y economía de reciclaje).
El punto directriz del presente
ensayo es tomar las palabras de Noam Chomsky, quien resalta el concepto de re significación
para usos de las grandes empresas y del sistema hegemónico.
Chomsky toma el concepto de
globalización y afirma que percé es un concepto sano, puesto que involucra
canales de comunicación ligados a las TIC que buscan el desarrollo de los
sectores que antes estaban marginados o excluidos. En la globalización percé, cercana
a la Aldea Global de McLuhan, se estima que la sociedad es una sola y jala para
el mismo lado, reduciendo necesidades de grupos vulnerables en un intercambio
franco de productos.
Sin embargo, este concepto que en
principio es positivo se vuelve irracional a medida que las grandes empresas
utilizan la globalización para intereses particulares. Globalización en cuanto
a beneficios de los grupos de poder y ya no por regiones, sino por seres
humanos y transnacionales.
Coca Cola, por ejemplo, ya no es
una empresa estadounidense porque gracias a la globalización tiene empresas en
todos los puntos del planeta, especialmente en los lugares donde el trabajador
es más explotado y tiene menos derechos.
La globalización bajo el marco
capitalista salvaje tiene por un lado esta suerte de tras nacionalidad. Sin
embargo, también se dedica a buscar mejores oportunidades a través de economías
de libre mercado, que permitan la reducción de aranceles en beneficio del extractivismo
de materia prima y del ingreso de productos elaborados, muchas veces atentando
con la seguridad alimentaria e introduciéndose al mercado con una fuerza
monopólica que se instaura en planos comerciales y sociales sobre Mipymes que
no tienen los recursos para competir.
En Tumbaco, pueblo donde vivo,
tengo un claro ejemplo. En la calle principal del lado izquierdo por años
estuvieron locales de pollos fritos, en total existían tres locales que daban
empleo a alrededor de 30 personas y que sobrevivían puesto que la gente, al no
tener un monopolio, escogía democráticamente donde comer. Los locales daban
mejores promociones, mejoraban la calidad y se esforzaban más para vender lo
cual beneficiaba al consumidor.
Esta lógica terminó cuando KFC se
colocó frente a la calle de estos tres restaurantes de pollo frito. El local
eliminaba el aura de la exclusividad y apostaba al consumismo. También, tenía una
publicidad demoledora y para los habitantes les parecía de mayor estatus comer
en KFC, que en esos locales pocos conocidos. El resultado fue que estos tres
locales de pollo frito sufrieron grandes pérdidas y la mayoría de gente ahora
come en KFC. (Estos locales han tenido suerte, pues todavía el capitalismo
salvaje no llega a este lejano lugar con toda su fuerza, pero sin duda de
seguir la tendencia estos tres lugares desaparecerán).
Esto es lo que plantea el concepto
de la globalización, pero ¿por qué la sociedad permitió que esta realidad
llegue a extremo que pocas personas generan productos que nosotros consumimos
de buena gana y a veces en desmedro de nuestra cultura? Es decir por qué
preferimos KFC al pollo frito del vecino…
Capitalismo salvaje
Alguna vez te has preguntado por
qué tienes tanta necesidad de cambiar un celular que lo compraste hace apenas 6
meses. La respuesta es porque los productos son generados para ser desechables.
Esto no es gratuito, la sociedad
líquida pregona que la lógica de mercado debe ser finita y constantemente
cambiable. El modelo económico es de una constante compra en beneficio de unos
pocos.
En papel blanco
En papel blanco la lógica del
mercado del capitalismo salvaje dice: la materia prima se extrae, luego se
realiza una manufacturación, posterior llega al intermediario, que llega al
ciudadano y finalmente el producto se recicla para volver a ser vendido.
EN LA PRÁCTICA
Extractivismo
Extractivismo significa sacar los
productos naturales renovables y no renovables. Los renovables son tales como
la madera o el agua, porque están en constante generación, y no se agotan.
No renovables básicamente son la
minería y el petróleo. Estos productos una vez extraídos no tienen posibilidad
de regenerarse, es decir son finitos. Por supuesto, la ventaja de estos últimos
productos es que son más apetecidos porque son menores y además no necesitan de
tiempo, por ejemplo esperar que un árbol vuelva a crecer.
Por eso en las últimas décadas la
economía a nivel global es básicamente extractivista de recursos naturales no
renovables. Sin embargo, el extraer estos recursos ya representa un impacto
para la naturaleza puesto que un campo de petróleo, por ejemplo, necesita de un
vasto sector que altera directamente al ecosistema.
El problema fundamental es su
finitud y por eso en los últimos años se han venido practicando economías
emergentes que apuestan más al cambio de la matriz productiva generando nuevas
escalas de productos.
Por años la economía no petrolera
se basó prioritariamente en monocultivos, pues son los que generan mayor
producción. Sin embargo, el problema es que los monocultivos queman la tierra,
por eso muchos sectores antes verdes son desiertos.
Sin embargo, lejos de planificar
una cultura más diversa, las grandes empresas imponen la lógica de la
producción en masa, puesto que genera mejores resultados en la extracción. A
veces para lograr estos cometidos se utilizan transgénicos, que reducen el
nivel de vitaminas pero aceleran el proceso de crecimiento de plantas y
animales. Básicamente un transgénico es un químico y el químico introducido en
una planta en el futuro será el que consuma un ser humano.
Decíamos que algunos Gobiernos
impulsan una lógica más humana en el extractivismo, pero las políticas
ambientales y de producción son muy limitadas en comparación con los intereses
de las grandes empresas, que diariamente depredan los sectores naturales,
especialmente en sectores periféricos, puesto que los países considerados
grandes ya han eliminado gran parte de sus zonas verdes, afectando el estilo de
vida de miles de personas que al ver eliminado sus recursos deben convertirse
en proletarios de un sistema capitalista.
Manufacturación
Qué es básicamente un proletario.
Se trata de un ser humano que no tiene los recursos de producción expresados
anteriormente, en muchos casos porque se les quitó paulatinamente con políticas
instauradas por Gobiernos que en el pasado defendieron los intereses del
capital y por ser también dueños de las grandes empresas.
Ahora el proletario, por la
necesidad de satisfacer sus necesidades básicas, tiene que asistir a su lugar
de trabajo y empezar con un proceso laborar y de explotación sistemática en lo
que Marx llamó la plusvalía.
El principal problema en este
inciso se llama propiedad privada, puesto que a pesar de ser el mundo para
todos y todos ser dueños de lo que hace la naturaleza, tenemos que alienarnos
al jefe de la empresa, que por tener dinero, o el capital, compró los recursos
naturales.
Es más, el empleado que cultiva
la tierra o corta la madera y el que elabora la mesa de esa madera tienen que
renunciar a esa apropiación de su fuerza laboral, pues la plusvalía traspasa
ese esfuerzo a bolsillos del empresario, que en términos pragmáticos no hace
nada en el proceso de producción más que “liderar”.
La ley de la competencia hace que
el empleado no pueda reclamar sus derechos pues si bien recibe una paga escasa,
siempre existirá una persona que esté dispuesta a trabajar el doble por la
mitad del sueldo.
Un problema final en este punto
tiene también que ver con el problema ambiental, pues al igual que en la fase
de extractivismo, en esta fase de producción también se apuesta por la
elaboración en serie de productos, tal como lo pregonó la Revolución Industrial.
Los productos elaborados en masa son más rápidos de hacer que los artesanales.
Para lograr los productos en masa se necesitan de tóxicos que son materias necesarias
para esa producción y en beneficio de crear en masa se depredan los recursos ya
no solo naturales, sino de humanos que son desechables en cuanto bajan su nivel
de producción. Recordemos también que cada vez más las personas son
reemplazadas por máquinas que elaboran los productos más rápidos.
Finalmente, no olvidemos que la
lógica de este mercado es efímera y ante la necesidad de reemplazar rápidamente
los productos, se deben utilizar materiales desechables como el plástico, por
ejemplo, que entre otros aspectos es una de las fuentes más contaminantes que
existe.
Intermediario
El producto está terminado y
listo para ir al intermediario, que en este caso es el Supermercado, la
franquicia de un restaurante o cualquier empresa monopólica que no ofrece la
oportunidad para que productos artesanales salgan al mercado. Básicamente
porque los productos artesanales son más caros y más lentos de hacer. (si
alguien prefiere lo artesanal lo hace en una suerte de consumo exótico y que en
la práctica es muy desigual al consumo en masa).
El por qué los productos en masa
son más baratos se entiende porque la depredación tanto natural como humana, en
lo que se llama la cosificación del trabajador en su naturaleza desechable,
hace que los costos en el producto final baje. No existe competencia frente al
pollo frito de la esquina y es más atractivo para el consumidor porque
constantemente recibe mediante los medios de comunicación publicidad de lo que
tiene que comprar.
Aquí el papel del marketing es esencial,
puesto que es el encargado de crear necesidades que no existen, por ejemplo,
comprarse unos zapatos de marca, cuando unos simples pueden ser suficientes.
Para concebir esta necesidad que
antes no existía casi siempre se alude al tema del prestigio y de los deseos.
Por ejemplo en la propaganda de una crema dental, el enfoque detrás de la
publicidad nos dice que tener dientes limpios no hará más felices y podemos
tener mujeres a nuestro alrededor y en general ser más populares.
La lógica de la compra siempre
nos estimula al deseo del prestigio frente a las otras personas. Por eso en los
publirreportajes siempre se pone la diferencia entre el aburrido que no tiene
el producto y se lo representa en blanco y negro versus el alegre y feliz
(incluso atlético y bien acompañado) sujeto que compró el producto y cuya
imagen está a colores.
El consumidor aquí aparece como
el eslabón que sirve para mover la economía del mercado mediante la circulación
del capital. El sujeto necesita tener prestigio y en esta sociedad el prestigio
se mide en base a cuanto consumes y que tan frecuentemente lo haces.
Por eso gracias a la publicidad
que nos recuerda lo infelices que somos, consumimos siempre. Nos volvemos
cosificados en cuanto no reaccionamos a los productos que se nos ofrece.
Constantemente nos endeudamos para seguir consumiendo y gastando.
El problema es que casi siempre
el deseo por la compra es mayor al producto comprado, por lo que la solución es
seguir consumiendo. Ir al centro comercial causa placer, nos sentimos
reconocidos.
Aunque también se generan sujetos
irreflexivos y técnicos, pues al necesitar cancelar la deuda de lo que
compramos, nos vemos en la obligación de dedicar menos tiempo al ocio (la
meditación de nuestro entorno) para sacrificarlo y volvernos máquinas que
producimos. A veces no somos capaces siquiera de disfrutar lo que compramos,
pues pasamos todo el tiempo en nuestro trabajo.
Reciclaje
Finalmente el ciudadano en base a
su necesidad de consumo para ser reconocido compró el producto, pero este al
tener el carácter de desechable debe ser sustituido rápidamente, puesto que el
celular que compramos hoy no se compara al que saldrá en el mercado en 6 meses.
El no actualizar nuestro celular
nos hará ver frente a la sociedad como personas de poco valor, pues no tenemos
la capacidad de consumo que exige la sociedad.
Por eso compramos el nuevo
celular y ¿el anterior? Pues en la mayoría de los casos se vuelve chatarra que
acumula los hogares y cuando el hogar ya no permite tener más basura nos vemos
en la obligación de botarla en basureros. Esto funcionó bien por un tiempo,
pero ante la desesperada necesidad de eliminar la basura, que estorba en las
ciudades, se generó la palabra reciclaje.
Aunque reciclar es bueno, nuestra
contaminación es mínima frente al gran problema que se encuentra en las
fábricas que son la causa de la contaminación a gran escala. Finalmente, muchas
cosas no se pueden reciclar y se evaporan a veces en fábricas o a veces en
basureros que al degenerarse producen más contaminación y posteriores
enfermedades.
Este es el esquema fuera del
blanco y negro. La globalización lo único que hizo fue maximizar esta realidad
e impactar de forma más rápida mediante la economía de libre mercado que en la
Unión Europea generó la crisis para muchos países al igual que la reciente
crisis que vive en Colombia que confiaron en los sistemas capitalistas norteamericano
y ahora padecen con pobreza, desempleo (que devienen de la tecnificación,
monopolios y falta de recursos naturales). (JLV)
Les invito a visitar mi blog: http://kakariko-village.webnode.es/
Supongo que si pasas gran parte de tu fin de semana
relacionado con un deporte en particular eres un un gran aficionado de aquello.
Si entre tus programas favoritos están sus eventos especiales transmitidos por
televisión, o si en los momentos de relax lo practicas, sea en persona o en
juegos de video y admiras incomensurablemente a quienes lo hacen
profesionalmente, eres en serio un fanático.
Eso es para mí el fútbol, desde que era un niño pequeño lo
vivo, me ha acompañado en muchas ocasiones y tengo mis futbolistas ídolos.
Además he aprendido lo que es la pasión gracias a lo que ha significado para mí
ser hincha de uno de los mejores equipos de América, la Liga Deportiva
Universitaria.
Primero en el Olímpico Atahualpa y desde hace 17 años en
Ponciano, he aprendido a disfrutar del juego, me he llenado la garganta de gol
y los ojos de lágrimas en más de una ocasión. Vi a mi equipo descender a la B y
pocos años después consagrarse como el mejor equipo de todo el continente.
Varios de los momentos más representativos de mi vida sucedieron cuando llevaba
una camiseta blanca con una U en el pecho.
La alegría más grande que me ha dado el fútbol
Aquello me enseñó que a veces es necesario dejarlo todo por
cumplir un sueño, que el amor que nunca cambias es el que sientes por tu equipo
de fútbol, que en la vida se reproducen muchas situaciones que ves en una
cancha y que haber pasado por la general de un estadio te puede enseñar a
enfrentar cierto tipo de problemas cotidianos. Lo más lindo de estar en una
barra es aprender valores como la amistad, la solidaridad y la lealtad, y
gracias a Liga aprendí eso y más.
Pero más allá de estas últimas líneas de ensalzamiento de mi
equipo preferido, quisiera centrarme en el momento cumbre de todo el juego: la
Copa del Mundo de la FIFA, que este año se llevará a cabo en el económica y
socialmente emergente Brasil.
Hablemos un poco del gigante sudamericano, del país
amazónico gobernado por Dilma Rousseff, aquel que se ha convertido en uno de
los países BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica), es decir, una de
las potencias económicas con mayor proyección internacional y que tiene en sus
costas atlánticas una de las mayores reservas hidrocarburíferas off-shore de todo el mundo.
"Nossa economia esta bem"
Se podría decir que sería maravilloso vivir allí y que
después dada aquella bonanza económica estaríamos hablando de uno de los sitios
ideales en todo el planeta para albergar la Copa Mundial y los Juegos
Olímpicos, que en 2016 se llevarán a cabo en Río de Janeiro.
El país de las grandes metrópolis y los recursos naturales prácticamente
inagotables es también uno de los que registra la más alta brecha
socioeconómica, es decir, la diferencia en el modus vivendi entre los sectores
más ricos y más pobres es altísima. Los ricos son muy ricos y los pobres son
muy pobres, repitiendo así una de los mayores problemas de toda Latinoamérica,
la inequidad.
Las familias más desposeídas son hacinadas en las llamadas
favelas mientras que las revistas de turismo exhiben solamente la parte bonita
de las ciudades, Río de Janeiro es aparentemente un Guayaquil más grande dada
aquella situación.
Dilma: "Aqui nós esconder os pobres"
Según datos del propio Gobierno de Rousseff son cerca de 50
millones las personas que viven en la pobreza, es decir, aproximadamente cuatro
veces la población del Ecuador. En 2013, la renta familiar del 20% de la
población poseyó el 57,7% del total de la riqueza nacional y el coeficiente de
Gini, indicador que va de cero a uno y que aumenta según lo hace la desigualdad
es de 0,55, cuando el ecuatoriano es de 0,47 y el de países como los nórdicos es
de 0,33. Aunque la diferencia parezca pequeña es muy alta.
Además deberíamos mirar un poco a la historia, cuando en
2004 Grecia organizó los Juegos Olímpicos y su gobierno de entonces realizó
altísimas inversiones, 10 años después vemos a la economía helénica devastada y
al presidente subastando su país al mejor postor. Las consecuencias en el
emergente Brasil podrían ser terribles, considerando que la inversión para la
Copa supera los 15.000 millones de dólares, cifra que se aproxima al 40% de la
totalidad del presupuesto general del Estado ecuatoriano para todo 2014.
Esto quedó de un escenario que hace 10 años perteneció a la élite olímpica
Y los efectos no vienen a futuro como en el caso griego, ya
se están sintiendo en el gigante sudamericano. Además del hacinamiento en
favelas, los mendigos están siendo “reubicados” en las zonas no visibles para
los turistas, los animales callejeros están siendo capturados y sacrificados y para
colmo la presidenta Rousseff decretó una reducción de horas de trabajo para la
población a fin de que la gente mire los partidos.
Si bien se esperan altas ganancias para el país anfitrión,
las cifras resultan irrisorias si se comparan con la inversión realizada, hace
cuatro años Sudáfrica (otro BRICS) no ganó más de 1.000 millones de dólares,
cifra que se podría superar en Brasil, pero considerando que la inversión en la
nación africana no superó los 8.000 millones, la cifra resultaría insignificante.
Además de aquello está la veintena de obreros que hasta la
fecha han resultado heridos o muertos en la construcción de los estadios. No quisiera
decir que la Copa le quedó grande a Brasil, pero va pareciendo que sí, que
quizá Latinoamérica no está lista para recibir a un evento de tal magnitud.
El tema es tan delicado en Brasil que las protestas por el
exagerado monto de dinero público en la construcción de escenarios (a un mes de
la apertura algunos están inconclusos), la infraestructura de transporte (aún
hay aeropuertos a medio construir y otros que definitivamente solo quedaron en
planos), los fan fests (ciertas ciudades no cuentan con los fondos suficientes
para organizarlos por lo que deberán pedir créditos al gobierno central) y el
consiguiente aumento en los precios de los servicios e impuestos (en 2013 se
intentó subir los precios del transporte público).
Además hay jugadores ex campeones mundiales como el
recientemente retirado Rivaldo y el actualmente diputado del Partido Socialista
Romário, quienes ya se han mostrado en contra de la organización de la Copa. El
otro lado es representado por el eterno amigo de los billetes verdes Pelé y el
ahora empresario y jugador de poker Ronaldo.
"Eu sou capaz de vender o meu pais pra ganhar dinheiro"
La verdad es que disfrutaré del Mundial porque amo el
fútbol, espero cuatro años para verlo nuevamente, pero creo que este año será
diferente, la Copa de 2014 será la de las desigualdades socioeconómicas, la de
las protestas y seguramente de la represión policial, como ya ocurrió en la
Copa de las Confederaciones realizada en el propio Brasil. Y ahora quieren
organizar también el Mundial de Clubes y la Copa América… no sé qué irá a pasar
con el querido país verde amarelho.
Que el balón empiece a rodar y nosotros a cantar los goles,
pero tratemos de no olvidar que junto a eso hay un pueblo que sufrirá las consecuencias
más difíciles gracias a tener en su casa a la fiesta ecuménica.